CELOS Y POSESIÓN
En Psicólogo Barcelona distinguimos entre dos formas de celos: celos racionales e irracionales.
Estamos o somos racionalmente celosos cuando:
– deseamos unas relaciones continuadas con nuestro amado/a.
– cuando estamos preocupados de que esta se rompa porque él o ella ama (o presta demasiada atención) a otra persona
Esto puede privarnos de su presencia, y supone probablemente la amenaza de una pérdida completa.
Cuando estamos racionalmente celosos nos sentimos frustrados y defraudados cuando nuestro amado/a presta «demasiada» atención a otros, pero no estamos gravemente trastornados.
Estamos o somos irracionalmente (o insensatamente) celosos cuando:
– exigimos u ordenamos de manera absolutista que nuestro amado/a nos quiera y preste atención casi exclusivamente a nosotros
– y nos sentimos horrorizados ante la idea de que él o ella puede intimar emocionalmente con otra persona hasta llegar incluso a poder abandonarnos por ella.
Cuando estamos irracionalmente celosos:
– tendemos a sentirnos gravemente ansiosos, hostiles y deprimidos,
– a rumiar obsesivamente sobre el grave peligro de perder nuestro amado/a,
– a ser suspicaz contra sus actos,
– a exigir continuamente pruebas o palabras de afecto de él o ella,
– y a intentar estar con él o ella prácticamente todo el tiempo.
Creencias Irracionales:
En Psicólogo Barcelona observamos que las personas insensatamente celosas y posesivas tienden a mantener de manera dogmática varias creencias irracionales que crean sus celos, como por ejemplo:
1 – «¡Debo tener una garantía de que tú solo me quieres realmente a mí y vas a continuar haciéndolo para siempre!».
2 – «Si tú no me quieres como yo te quiero a ti, debe de haber algo radicalmente malo en mí, y por lo tanto no merezco tu afecto«.
3 – «Como yo te amo intensamente y estoy entregado/a a ti todo el tiempo, tu siempre tienes que devolverme ese amor, de lo contrario me causaría un gran dolor que no lo hicieras, y sería una persona mala y abominable».
4 – «A no ser que tenga la absoluta certeza de que tú me adoras y siempre lo harás, mi vida es demasiado coactiva y desagradable, y apenas merece la pena seguir adelante».
Cuando las personas están irracionalmente celosas, hay que intentar ayudarlas especialmente a reconocer sus creencias irracionales y cambiarlas por creencias racionales. En nuestro centro de psicología de Barcelona hacemos esto aprendiendo a «discutir» las propias irracionalidades y acabar adaptando filosofías más realistas y menos dogmáticas acerca del amor y la vida«.
Ejemplos de creencias racionales (alternativas):
1 – «Me gustaría mucho que me quisieras a mí como yo te quiero a ti, pero no hay razón por la que debas hacerlo. Puedo seguir siendo feliz, aunque no tan feliz, si no lo haces».
2 – «Puede que seas la mejor pareja amorosa que probablemente encuentre y por tanto valoro mucho tu amor y compañerismo, pero si por alguna razón te pierdo, podré con toda certeza amar a otro y lograr una relación amorosa satisfactoria con alguno/a de ellos».
3 – «Aunque te quiera mucho y esté muy dispuesto a entregarme a ti, mi amor no te obliga a que tú me quieras a mí en correspondencia y que te restrinjas a mi. Tienes perfecto derecho a tener tus propios sentimientos y conductas respecto a mí y, puesto que no puede hacer que los cambies intentaré aceptarlos lo mejor que pueda y seguir amándote»
4 – «Si me engañas o contradices de alguna otra forma los sentimientos de amor que dices que sientes por mí y traicionases nuestra relación, consideraré tu conducta como poco amorosa e indigna de confianza pero no te despreciaré como persona por actuar de esta indeseable manera».