AMOR OBSESIVO-COMPULSIVO
El amor obsesivo-compulsivo, o lo que Tennov (1979) ha llamado «acaramelamiento«, es normalmente, aunque no necesariamente, de tipo romántico. Una madre puede amar obsesivamente a su hijo o hija, un emprendedor puede amar compulsivamente su trabajo, y un adolescente puede adorar obsesiva-compulsivamente a su amigo/a. No obstante, en gran parte, el «acaramelamiento» es una forma extrema de amor romántico que frecuentemente incluye:
(1) conductas trastornadas, como el pensar obsesiva e intensamente en el sujeto amado;
(2) la necesidad apremiante de reciprocidad;
(3) cambios de humor dependientes en la interpretación que el amante haga de la reciprocidad del sentimiento del sujeto amado;
(4) intensos sentimientos de ansiedad y depresión si el sujeto amado no parece corresponder al amor de uno;
(5) idealización de el sujeto amado y rechazo a ver y observar sus deficiencias;
(6) afán por hacer cosas temerosas para ganar o mantener los favores de los sujetos amadas.
Los psicólogos observamos que el amor obsesivo-compulsivo normalmente implica que el amante mantenga con firmeza las siguientes creencias irracionales:
– «Debo» «tener la reciprocidad de mi amado/a o de lo contrario soy un sujeto inadecuado e indigno»
– «Es terrible perder a mi amado/a ¡No puedo soportarlo!«
– «Si mi amado/a no se interesa por mi o desaparece, la vida no tiene valor y mas vale que este muerto/a!»
– «¡Mi amado/a es el único del mundo para mi, y solo su amor puede hacer que yo y mi vida tengan sentido!»
– «¡Como tengo que gozar del favor de mi amado/a y debo sentirme desgraciado, merece hacer cualquier cosa, incluyendo el arriesgar seriamente mi vida para lograrlo/a!».
La terapia de los psicólogos de Psicólogo Barcelona emplea métodos cognitivos para ayudar a superar los trastornos obsesivo-compulsivo respecto al amor, incluyendo los siguientes:
1- Les enseña como disputar de manera activa y persistente sus creencias irracionales y cambiarlas por preferencias relativistas.
2- Les enseña como emplear creencias racionales o afirmaciones de afrontamiento y como pensar en ellas y seguir repitiéndolas hasta que verdaderamente las sientan. Las auto afirmaciones racionales típicas son:
– «¡Me gustaría lograr la reciprocidad de mi amado/a pero no la necesito para ser feliz!»
– «¡Seria desafortunado si perdiera a mi amado/a pero no sería horrible y podría soportarlo!»
– «Mi amada/o no es el/la único/a a quien podría querer y podría tener una existencia digna aunque él o ella no me amara».
3- Muestra como emplear técnicas de distracción cognitiva como el método de relajación progresiva de Jacobson, o el yoga o técnicas de meditación, para desviar los pensamientos intrusivos a cerca de su amada/o.
4- Enseña a los amantes obsesivo-compulsivos cómo pueden también querer a otros además de su único y «verdadero» amado/a y pueden por lo tanto ser menos obsesivos.
5- Ayuda a hacer un listado y revisar concienzudamente algunas de las desventajas de su excesivo apego a su amado/a y algunas ventajas de querer a otros, tener otros intereses y compromisos hasta que se vuelvan menos obsesivos con un amado/a especial.
6- Enseña especialmente a los amantes obsesivo-compulsivos (o acaramelados) como trabajar los síntomas secundarios de su perturbación. A nivel primario, se vuelven obsesionados y compulsivos, y después, a nivel secundario, se dan cuenta de esto y se repiten creencias irracionales como:
– «¡no debo estar obsesionado!»,
– «es estúpido estar tan irracionalmente enamorado, y por lo tanto soy una estúpida y despreciable».
Enseña a disputar estas creencias irracionales auto-desvalorizantes preguntándose a sí mismos:
– «¿Por qué no he de estar obsesionado?»
– «¿Dónde está la evidencia de que yo soy estúpido/a y despreciable por estar compulsivamente enamorado/a?»