REFLEXIÓN

 

 

En los casos de asesinato por violencia de género, generalmente los agresores dan por hecho que una vez que eliminan a sus parejas su vida de alguna forma ha terminado. Normalmente, no intentan esconderse o rehacer su vida. Suelen entregarse a la policía sin ofrecer resistencia y muchos se suicidan o lo intentan. Estamos ante una reacción extrema, desesperada de estos hombres.

¿Por qué…?¿Qué les ha llevado a esta situación?

¿Por qué necesitan matar a sus parejas, pero no pueden vivir sin ellas?